Beirut, 15 jun (Prensa Latina) Los poderes de El Líbano acordaron revalorizar la moneda nacional respecto al dólar, a fin de menguar la ira popular contra una devaluación de 70 por ciento, destacan hoy medios informativos.
La cotización de la divisa norteamericana alcanzó un promedio sobre las cinco mil libras libanesas que deterioró a casi nada los salarios de 90 por ciento de los trabajadores.
Políticos y parlamentarios advirtieron que el Banco Central al inyectar dólares en el mercado, una de las medidas para rebajar la tasa cambiaria, agotaría sus reservas, estimadas en 22 mil millones.
La institución prestamista recurre a sus arcas para sufragar importaciones de trigo, combustible y medicamentos que consumen unos seis mil millones de dólares al año.
El jefe del partido Fuerzas Libanesas, Samir Geagea, enfatizó en que con la aplicación de reformas económicas podía contenerse la depreciación de la moneda.
‘No se puede detener el tipo de cambio de la libra con la pérdida de más dólares del Banco Central … Detener el tipo de cambio tiene una sola solución: reformas y reformas’, suscribió Geagea en un mensaje por redes sociales.
Mientras, el diputado por la facción Corriente Patriótica Libre, Michel Daher, se refirió a la necesidad de restaurar la confianza del pueblo con el Gobierno, al comentar que el remedio propuesto será temporal y el dólar continuará subiendo.
Durante los últimos días, miles de libaneses salieron a las calles en protesta por la devaluación de la moneda nacional que deprime hasta casi el mínimo el poder adquisitivo de los obreros y empleados.
A diferencia de violentas manifestaciones de jueves y viernes último, varios cientos marcharon este fin de semana por esta capital y la sureña Sidón para demandar la renuncia del Gobierno.
La calma también llegó al norteño centro urbano de Trípoli, tras una noche de enfrentamientos entre protestantes y militares que dejó un saldo de 72 heridos.
El patriarca cristiano maronita Beshara Rai recabó la acción del Gobierno para poner coto a saboteadores que descarrilaron la sublevación pacifica popular hacia el vandalismo y los destrozos.
Rai aludió de algún modo a partidos políticos, al decir que inducen a delincuentes a empañar el levantamiento legítimo de la población contra la crisis económica y financiera.
‘No permitiremos que nadie destruya el estado civilizado de El Líbano, a la vez que apoyamos al gobierno con un solo propósito, escuchar la voz de la gente que quiere un gobierno que implemente reformas’, dijo el jefe religioso.